El discurso de odio se refiere a expresiones verbales, escritas o simbólicas que tienen como objetivo difamar, denigrar o incitar hostilidad hacia individuos o grupos basados en características como la raza, etnia, religión, género, orientación sexual, discapacidad u otras características identificables. Este tipo de discurso busca promover la discriminación, la violencia o la exclusión de los individuos o comunidades afectadas.

El discurso de odio se considera una forma de expresión que va más allá de la simple diferencia de opiniones y se convierte en una amenaza para la coexistencia pacífica y la igualdad de derechos. Diversas organizaciones, tanto gubernamentales como no gubernamentales, trabajan para monitorear y abordar el discurso de odio, ya que puede tener consecuencias perjudiciales en términos de derechos humanos, cohesión social y seguridad.